Los placeres de Aianara, ella es una tierna colegiala de 18 añitos que cuenta con unos padres demasiado protectores, que aún no la dejan quedarse en casa sóla. De modo que cuando ellos están en el trabajo se encarga de cuidarla David, un vecino de confianza, al que sus padres conocen muy joven, éste les hace de canguro y acompaña a Aianara en las frias tardes de invierno.
Ainara como cabe suponer es una chica mal criada, cena a base de chucerías y se pasa el día chateando con los amigos. Ahora David, cansado de recibir siempre las quejas por el mal hacer de la chica va a empezar a aprovecharse de las travesuras de ella para su satisfacción personal. Irrumpe en su habitación y vuelve a pillarla chateando y comiendo a deshoras, David la propone un juego inocente, ponte esta venda en los ojos y adivina que es lo que pasa.